GINEBRA - La ONU advirtió de un fenómeno creciente y preocupante en Centroamérica: el de centenares de niños que viajan solos hacia el norte, con los ojos puestos en Estados Unidos, lo que les hace extremadamente vulnerables a numerosos peligros.
"Es un fenómeno que perdura y que nos preocupa enormemente. Esos niños van en busca de sus padres o familiares, generalmente inmigrantes irregulares en EU, y se encuentran en una situación muy difícil, atrapados en los países de tránsito", dijo a Efe Jean Philippe Chauzy, de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).La agencia de la ONU ayudó esta semana a regresar a Nicaragua, su país de origen, a un grupo de cinco niños que viajaban hacia Estados Unidos y fueron interceptados en El Salvador.Estos cinco menores son los últimos de un flujo cada vez mayor de niños que viajan solos por los países centroamericanos hacia Estados Unidos, y que se enfrentan a graves riesgos en su camino, como la violencia de las "maras" (pandillas) y el abuso de traficantes.La mayoría de ellos viajan ilegalmente para reunirse con sus padres en EU, quienes pagan entre $4 mil y $5 mil a traficantes o "coyotes" para que les ayuden, pero muchos de ellos marchan solos para encontrarse con sus familiares o simplemente huyen de la pobreza y la violencia.