El Banco de México admitió que la tendencia en la subida de los precios de alimentos desde mediados de abril último, genera hoy una taza de crecimiento de la inflación que alcanza un 4,55 por ciento.
La institución bancaria explicó que ese nivel de inflación no se registraba en el país desde 2005, mientras que el índice de la canasta básica marcó un incremento de 5,25 por ciento, el mayor encarecimiento de los últimos 35 meses.
Por otra parte, indicó que la carestía de alimentos ascendió 7,29 por ciento en los pasados 12 meses, aunque en los últimos 15 días la escalada alcista afecta con particular fuerza a productos de consumo básico.
El Banco de México mencionó entre los comestibles que han aumentado su costo promedio 8,5 por ciento, al arroz, pan, grasas, pollo y distintas hortalizas y vegetales.
Mientras tanto, los informativos nacionales divulgan sendos llamamientos a México de Naciones Unidas y la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) para que instrumente medidas necesarias tendentes a enfrentar la crisis alimentaría que se vive en el mundo.
Esas instituciones internacionales señalan la importancia de aumentar los subsidios en zonas marginadas, en tanto se mantenga la actual situación, que el diario especializado El Financiero denomina como “la inflación de los pobres”.
Ante este panorama, el secretario de Economía, Eduardo Sojo, dijo que antes que concluya 2008 se debe poner en marcha una reserva estratégica de alimentos, lo que han demandado en las últimas semanas diversas organizaciones campesinas y sociales.
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